¿Cómo juzga el ejército a un desertor que abandona las trincheras por amor? ¿Qué sintieron los parisinos al saber que su Gobierno dejaba la ciudad? ¿Cómo huyó de un hospital de campaña un grupo de soldados locos? ¿Es posible que la conquista de una cima se decida en la prensa?
La guerra moderna, dicen, ya no es una lucha de hombres, sino de multitudes, de soldados que caen sin saber quién ha disparado la bala, de ciudades que desaparecen en un solo día. Pero desde dentro, con las botas llenas de barro, aguantándole la mirada al sufrimiento, Gómez Carrillo no deja de tomar notas. Cronista de la Primera Guerra Mundial, nos legó el relato impresionante de una historia nunca contada: del voluntario anónimo que se dejó matar y solo encontraron en sus bolsillos papeles en blanco; del inglés que capturó nueve alemanes con una pistola descargada; de la madre que siguió recibiendo cartas escritas por su hijo muerto en el frente; de la granjera que, sentada en su jardín, vio entrar y luego salir de Francia al ejército alemán.
Pequeñas historias de la Gran Guerra recoge los mejores artículos de este inquieto corresponsal, sus agudas reflexiones en torno al ser humano y la violencia pero, por encima de todo, las pequeñas historias de quienes entonces vivieron.